LA MEDITACIÓN. LA CONTEMPLACIÓN Y LA CONCENTRACIÓN

por | Jul 10, 2023 | Artículos | 0 Comentarios

Cada instante qué pasa, las personas tenemos más información para saber lo beneficioso que es cultivar todos los aspectos de nuestra condición humana, cuerpo, mente y espíritu.
Para cuidarnos y ser responsables, debemos de comprender cómo poder tener acceso para atenderlo correctamente. A través de la concentración (cuerpo) contemplación (mente) y meditación (espíritu), es donde te vas a encontrar lo que estás buscando.
Atender estos tres aspectos va a ser fundamental para estar al servicio de la vida, para que alcances tu propósito y para que en tu experiencia encuentres el amor, el valor y la satisfacción de saber que eres grandeza.

CONCENTRACIÓN

Concentrarse es un ejercicio fantástico que podemos observar no solo con sus resultados, estudiando, memorizando, recordando… estos los podemos ver materializados, si tenemos la voluntad de concentrarnos en estudios como por ejemplo, medicina, en un periodo de tiempo serás médico.
Concentrarse, es poner una parte de tu mente en blanco, disponible para llenarse de una cuestión que previamente has considerado que debes enfocarte para conseguir algo valioso, por lo que crees que te va a aportar. Si la concentración está al servicio de lo que sientes que quieres aprender, su resultado va a ser más rápido que si la concentración es sin voluntad o rechazo, te costará muchísimo más.
Cuando te concentras para aprender una cosa, siempre trabajas sobre un punto, pones tu voluntad en una o varias cosas concretas y ves que esa capacidad, en vez de menguar es ejercitada, pertenece al cuerpo.

“La concentración es como si estás en el agua consciente de que estás flotando”

CONTEMPLACIÓN

La contemplación es más controvertida, pues depende de las creencias, y de una fe que en muchos casos acompaña el dogma, Precisamente por esto es por los que muchas personas rechazan la contemplación como una práctica diaria, aunque ¿ quién no ha pensado en la creación?, ¿ quién cuando desea algo alguna vez no se ha acordado de la divinidad?
Aunque muchos quieran escapar u ocultar a todos, nos vienen cuestiones relacionadas con la oración, la contemplación.
Lo cierto es que las doctrinas a nuestra sociedad actual no le encaja demasiado, sin embargo esa brizna de fe sigue estando en su corazón.
La contemplación es un estado de relajación en donde mantienes una íntima conversación con el misterio, con lo que más familiar te resulta de la divinidad, en donde traspasas la frontera de la lógica de la mente y te enfocas en lo que ahora es intangible.
Con la contemplación traspasas la mente para abrir un espacio, a confiar en otro conocimiento supremo.
Con la práctica de la contemplación puedes atestiguar realidades inexplicables, puramente experimentales.
Aunque pertenece a la mente porque es el que contempla quien dirige a donde quiere ir y como dirige su oración, su función última es la de observar como trasciende la mente.

“La contemplación es como estar en el agua consciente de que puedes nadar y elegir hacia donde te quieres dirigir”

MEDITACIÓN

La mente observada, en calma, abierta a lo que emerge para ser atendido, explorado y amado, la meditación va más allá de la mente, es capaz de llegar a terrenos inexplorados, desconocidos para el meditador pero con un incalculable valor.
A través de la meditación te conoces mejor, gracias a ella emergen sentidos desatendidos, rescatas escenas perdidas, un sin fin de posibilidades, la mejor inspiración para ayudarte en el camino, a través de la meditación puedes encontrar tu interior, para así conocerte, encontrarte e inspirarte.
Quien la practica todos los días, entiende sus beneficios, quien ha conectado con la meditación sabe que es su mejor medicación, su íntimo momento, disfruta de la libertad de poder compartir ese momento con lo más esencial de su universo.
La meditación trabaja el espíritu, esa energía que todos sentimos a niveles muy íntimos, es la gran inductora para entrar en el viaje del autodescubrimiento.

“La meditación es como sabiendo que estás en el agua y que sabes nadar, decides sumergirte para ser testigo de lo que hay en las profundidades”

Sobre mí

Ruth Caro Vegas

Podría decir que soy terapeuta transpersonal, naturópata, investigadora en antropología y filosofía o que la maternidad, la familia y la sociedad son los que me han regalado mis conocimientos.

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